"Los dibujos animados de Disney influyen en el Público Infantil"
Por Mitri, Claire
¿Qué
es lo primero que se nos viene a la mente cuando escuchamos la palabra
Disney? Tal vez sea infancia, inocencia y diversión. Es así como esta compañía
trata de venderse al mundo, pero sin embargo existe una verdad tras todo
esto, donde nos damos cuenta el valor y la historia de los
dibujos animados más conocidos, y podemos observar la influencia que
tienen hacia los niños, quienes hoy Disney considera como su público
objetivo, sin dejar de lado a los adultos.
Al
comienzo, los dibujos animados de Walt Disney, (director y pionero de
estos dibujos), no estaban dirigidos a un público infantil, y en sus historias,
el objetivo principal era hacer reír al espectador con escenas socialmente
incorrectas. En la mayoría de los casos incluían ciertos elementos de
crítica social.
El
primer dibujo animado creado por Walt Disney en los años 20, fue Mickey
Mouse, un personaje descarado, travieso, que representaba a la clase
media-baja, de raza negra y quien escuchaba música jazz. En ese entonces
este tipo de música era mal vista por la sociedad blanca.
A
partir de los años 30, los dibujos animados de Disney empezaron a buscar
otro tipo de público, cambiaron el estilo de los relatos, en donde ya no había
tanta crítica social sino más bien historias y personajes más suaves y
menos comprometidos.
A
partir de los 70, tras la muerte de Walt Disney, los dibujos animados
deciden dirigirse completamente al público infantil, reflejando ideas más
conservadoras, y construyendo imágenes inocentes, divertidas y aptas para
todo público. Por entonces sus películas comienzan a transmitir valores
apropiados, historias de buenos y malos, lo moralmente correcto,
finales felices y personajes dulces que comunican ideas conservadoras al
mundo. Sin embargo, no podemos dejar de lado que en ese entonces y hasta
hoy en día, los espectadores pueden optar por otro posible significado de
lo que realmente la historia desea transmitir, teniendo en cuenta los
posibles mensajes contradictorios que se pueden encontrar en alguno de
estos dibujos. Actualmente, los niños toman estas películas, como ejemplos
de la vida cotidiana, y se ve muy claramente el reflejo que tienen hacia
ellos, y la interpretación que hacen a partir de los personajes animados.
La
cultura y la ideología de Disney se transmite a través de los dibujos
animados, definiendo a los ciudadanos principalmente como consumidores y
espectadores que asumen valores conservadores y no cuestionan el orden
social establecido.
La
mujer es sumisa y obediente, se orienta al amor y al matrimonio, es ama de
casa, se preocupa por la familia, y en diversos casos es “la niña inocente“ o
“la mujer malvada”.
Es
interesante nombrar algunas películas de dibujos animados donde podemos
identificar el rol de estos personajes estereotipados. Por ejemplo en El rey
león vemos la actitud sumisa de las leonas, incapaces de hacer algo cuando
Scar, el rey malvado toma el poder. En Aladino, por su parte, Jazmín, se
convierte en el objeto de deseo del protagonista; y en La Sirenita, el
personaje femenino principal suele verse como una mujer rebelde que lucha
por lo que quiere, pero finalmente encuentra el amor y al hombre de su vida, y
cambia sus planes. También podemos ver los estereotipos femeninos en
Hércules, quien es la mujer la que cuida a la familia, la que llora, es
sensible, dulce, se preocupa por su estética, y se siente atraída por los
hombres musculosos y de buen físico.
Es
interesante remarcar que en estas películas observamos aspectos donde la
raza y las clases sociales se diferencian. Por ejemplo, mostrando al personaje
que pertenece a otra cultura, como alguien malvado o tonto. Esto nos
conduce a vincular la marginación que se ve en la pantalla con lo que se
vive también en la sociedad real. A través de estos films los niños
aprenden, creando así estereotipos que pueden subestimar al prójimo.
Esto
pasa no solo en la caracterización de los personajes de las películas,
sino incluso en las canciones, donde se remarcan claramente estas ideas.
Tal como lo encontramos en la canción de Aladino, las noches de Arabia
cuando dice: “y si allí, les caes mal, te van a multar. ¡Qué barbarié!
Pero es mi hogar…”.
Otro
aspecto interesante donde podemos observar la “discriminación” con la
intención de marcar las diferentes clases sociales, es en la película La
Sirenita traducida al castellano, en donde el cangrejo, un personaje que
todos se burlan y es el “tonto” de la película, tiene un acento cubano que
sobresale en comparación del resto de acentos de los personajes.
El
orden social que se presenta en las películas de Disney es también un tema
interesante para analizar. En el caso de El Rey León, se presenta una sociedad
jerarquizada, donde el rey es el que manda, y existen los subordinados,
que son los otros animales, los cuales se encuentran “humanizados”,
sin ningún tipo de poder, y en constante lucha para cambiar su situación
social. Esto se puede pensar en función de la vida actual, como una
interpretación de nuestra sociedad, donde el público se identifica.
El
presente ensayo intenta una reflexión profunda acerca de los estereotipos
que encontramos en estos dibujos animados, y que se reflejan en la historia y
los valores que transmiten. Se busca también denunciar cómo el público infantil
en específico se ve influenciado por estas historias, ya que
son ellos quienes resultan los espectadores y consumidores
principales de este tipo de films. Los niños al ver estas
películas se ven afectados por los personajes, los estereotipos y
las historias que allí trascurren. Y quizás, a largo plazo, estos
mismos niños, al ser adultos, traten de imitar a aquellos héroes de
su infancia, y todos los conceptos que acarrean.
¿Por
qué el cangrejo en la película de La Sirenita, tiene un acento cubano?,
¿por qué los hombres son los personajes que saben más acerca de la tecnología y
la ciencia?, ¿por qué los personajes masculinos son los héroes y los más
agresivos? ¿por qué los personajes femeninos siempre buscan el amor y
se encargan de la familia? ¿por qué hay personajes malvados, historias
tristes y finales felices?
Cuando
vemos las historias de Disney, entendemos que estos estereotipos sostienen
las historias y, de alguna manera, buscan conducir al público infantil a estas
formas de pensamiento..
¿Y
qué problema hay de que estos niños se asemejen a los personajes de los
dibujos?
El problema no son las películas, los dibujos, ni mucho menos los
dueños de la compañía. El problema es que poco a poco, y a lo largo del
tiempo, mientras va cambiando la sociedad y las formas de pensar, las películas
y sus historias también se van modificando, creando personajes aún más
malvados, y con historias que representan la vida actual, donde los niños
observan e idealizan un concepto de vida. “El receptor pasivo (quienes en este
caso consideramos al público infantil) consume a los medios de
comunicación (los dibujos animados) para satisfacer sus
necesidades propias, y utilizan al medio para gratificarse”
(EliuKatz, Jay Blumer, Michael Gurevitch, 1986. Usos y gratificaciones).
El
público infantil utiliza la comunicación, entre otros recursos de su
ambiente, para satisfacer sus necesidades y para conseguir sus objetivos. El
consumo de estos medios y de lo que ve la audiencia es considerada como
una respuesta a las necesidades de la sociedad.
La
Teoría de Usos y Gratificaciones explica también que “Los personajes son
suficientemente conscientes como para poder informar sobre su interés y su
motivo en casos determinados, o por lo menos reconocerlos cuando se
ven confrontados por los medios masivos en una formulación verbal,
inteligible y familiar”. (EliuKatz, Jay Blumer, Michael Gurevitch, 1986.
Usos y gratificaciones)
En
este caso estoy totalmente en desacuerdo con este supuesto, ya que no
todos somos conscientes del papel que llevamos en cuanto a satisfacer nuestras
necesidades, utilizando los medios de comunicación. Sobre todo cuando
hablamos de un público infantil, que inconscientemente utiliza
los estereotipos para identificarse.
Cuando
somos conscientes de que estamos utilizando el medio para distraernos,
esto “Hace surgir ciertos valores, cuya afirmación y refuerzo son facilitados
por el consumo” (Eliu Katz, Jay Blumer, Michael Gurevitch, 1986).
Este
es un ejemplo claro, de los puntos negativos que tiene esta idea de que
los niños son influenciados por lo dibujos animados de Disney, y utilizan
estos medios para satisfacerse. Muchas de las cosas que los niños aprenden
observando los dibujos animados, son valores y creencias que no
deberían ser transmitidas hacia ellos. Ideas y estereotipos que
actualmente son un problema social, originarios de las diferentes clases
sociales, la discriminación, etc. Al observar el estereotipo de una
princesa, se aprecia la belleza física (tiene que ser delgada), el amor, y
todo lo perfecto para tener un final feliz. Y como todos sabemos, no es así; la
vida está compuesta por diversas cosas que los niños tienen que aprender,
y al sentirse identificados con estos personajes ideales, concluyen con
una idea de la vida superficial.
El
consumo de los medios de comunicación, en específico los dibujos animados
de Disney, cuyos personajes tienen distintas personalidades, pero siempre
siguiendo el mismo estereotipo de malo, bueno, bonito, varonil, y un final
feliz, crea también valores como “la moda”, donde los niños las aplican en
su ambiente actual. Si la princesa está vestida de alguna manera, ellas también
lo quieren. Si el hombre fuerte es “musculoso”, ellos también lo quieren.
Si el personaje “tonto” actúa de distinta manera, ellos se identifican, y
tratan de evitar ser así. “La situación social produce tensiones y
conflictos que llevan a presionar su alivio mediante consumo de medios
masivos”. (Eliu Katz, Jay Blumer, Michael Gurevitch, 1986). Diversión,
conocimientos, relaciones personales, estética, y sobre todo la identidad
personal, son necesidades que crean estos estereotipos. ¿Qué pasa cuando uno se
identifica con un personaje? Enfocándonos en un público infantil, se crea
una idealización acerca de un personaje y su identificación.
“La
situación social produce tensiones y conflictos que llevan a presionar su
alivio mediante consumo de medios masivos” (Eliu Katz, Jay Blumer, Michael
Gurevitch, 1986).
Los estereotipos
en las películas a veces se entrecruzan con la vida real: el padre,
un hombre fuerte, o el que manda y sabe de tecnología. La mujer, ama de casa,
la que llora, sensible, y busca amor. Las niñas quieren ser como esos
personajes, creando una estética ideal: “la mujer bonita, delgada y
que finalmente encuentra al amor de su vida”. Esto tiene aspectos positivos
y negativos. Por ejemplo, para la niña que quiere buscar a su príncipe
perfecto; o los niños que quieren ser musculosos y que deberían saberlo todo.
Aquí se genera una situación de poder, siempre presente en las películas,
en donde se transmite fuertemente ese valor a los niños,
quienes dejan de hacerse hombres cuando no se identifican con el personaje
y que muchas veces también incluye violencia.
Cuando
se sienten solos, cuando quieren idealizar, imaginar, y satisfacer sus
necesidades, el medio de comunicación les ofrece esa oportunidad. El
problema surge cuando el dibujo está al alcance de niños que no tienen el
criterio para saber qué está bien y qué está mal, y como consecuencia
aparecen problemas psicológicos, vinculados con la identidad y la
autoestima.
En
cuanto a los dibujos animados de Disney, éstos al transmitir un entorno de
felicidad, no son tan mala influencia para los niños, como otros dibujos
animados de hoy en día. Sin embargo, al ofrecer distintos estereotipos, le
damos la oportunidad al público infantil de que utilice estos medios para
identificarse con el personaje que más se acomode. Esta
influencia está dada también por la manera en las que se
desenvuelve el proceso de comunicación, que va dirigido directamente
al receptor (público).
¿Qué
tipo de comunicación reciben cuando éstos ven películas? ¿Cuáles son las
funciones en el lenguaje que hace que este proceso de comunicación sea aún más
entretenido?
Este
proceso de comunicación es la transmisión de información que va desde el
emisor hacia el receptor, y la manera en el que estos lo reciben. Existen
diversos modelos de comunicación que explican el proceso de transmisión de
información, pero creo que el más adecuado para hacer referencia a un
público y una película, es el Modelo Lingüístico y el concepto de
dominancia que propone Jackobson. “La comunicación humana tiene
características propias, y el lenguaje tiene distintas funciones” (Marc,
E. y Picard, D. 1992).
Todas
las formas de comunicar en una película de Disney, incluyen algunas de
estas funciones con el objetivo de captar la atención del receptor. Cuando
se trata de las canciones, éstas se expresan de una manera singular, y el
infante no sólo se las aprende de memoria, sino que comprende la
situación, ya que las canciones son explicativas y hacen referencia a lo
que está sucediendo en el contexto de la película. Se puede decir que
estas funciones que comprenden el proceso de comunicación en dibujos como
éstos, van dirigidos al receptor, captando su atención, y éstos al tratar
de imitar al personaje
divertido,
se sienten más a gusto y se identifican con lo que están observando.
Haciendo
una referencia más general podríamos detenernos en los medios de
comunicación (TV, o cine) que exponen estas películas, y en donde podemos ver
también la relación e influencia que tienen hacia el público, en este caso
el infantil.
La
teoría Crítica, postula que los medios de comunicación contribuyen a
neutralizar las relaciones de poder, ya que generan un empobrecimiento de
las capacidades del ser humano. Se les compara con las industrias, ya que
ambas son estándar, tienen los mismos patrones y características.
A la cultura la imponen los medios, no las masas. Todo lo que
el público observa, son estereotipos y conceptos formados por los
medios de comunicación, y cuyo público idealiza y lo toma como referencia
para hacerlo similar a su vida.
Todos
los dibujos animados están compuestos por los mismos estereotipos que
hablábamos cuando hacíamos referencia a la teoría funcionalista. Existen
cuatro personajes y/o características principales que nunca faltan; el
bueno, el malo, la bella, el feo, y un final feliz. Se trata de una
concepción del mundo y de la vida muy alejada de la realidad del niño que
la consume. Él observa, idealiza lo quiere, pero es tan perfecto que es
difícil de conseguir. He aquí una de las razones por las cuales
hablamos de consecuencias negativas en el consumo de estos dibujos.
Son
historias que confunden a los chicos, quienes no ven que su vida concuerde
con lo que observan en las películas.
“Si
quieres no te vistas a la moda, pero nadie te va dar trabajo”.
Con
estas palabras trato de explicar metafóricamente que los dibujos animados
y los medios de comunicación en sí, estandarizan y estereotipan características
en los personajes que hacen que las sociedades se manejen por lo material.
El
personaje hermoso, vestido de cierta manera, impone una moda que si no
eres así, pues tampoco serás parecido a él. Por esto es que el sujeto vive
una vida que no es propia, concepto de alienación impuesto por los medios
de comunicación.
El
continuo maltrato, y el quiebre de toda resistencia individual es la
condición de vida que se da en esta sociedad, y que es extraída por los dibujos
animados, cuya violencia siempre está. Centrándonos más en Disney, podemos
observar como la acción consiste en divertidas escenas violentas que
suceden continuamente y se expresan de alguna u otra manera.
Los
niños se acostumbran a lo que ven. Y la violencia aparece en estos dibujos
como algo natural y divertido en la vida, y eso deviene en una influencia
negativa. Por otro lado, los aspectos positivos que encontramos que
brindan estos dibujos animados, tienen una contracara, ya que la mayoría de
veces son irreales, porque muchos de los conceptos que transmiten son
escenas que en nuestra vida ocurren con muy poca frecuencia, o que invitan
a “soñar” algo imposible. Es irónico pensar que historias tan inocentes y
entretenidas puedan terminar jugando un papel determinante en la
construcción de esta vida “ficticia” en la que estamos.
Entonces,
¿Los dibujos animados de Disney influyen de una manera positiva o negativa
en el público infantil? Es cierto que los niños aprenden y tienen un
concepto más claro de lo que es y puede ser la vida en una sociedad como
la nuestra.
Pero,
la excesiva exposición a dibujos animados donde existen escenas violentas,
conduce a consecuencias psicológicas como la insensibilizar la angustia y la
repulsión que deberían naturalmente producir estas escenas violentas.
También conlleva a que la violencia se aprecie como algo interesante
y divertido. Se aprenden, con detalles técnicos y operativos, formas muy
crueles y dañinas de agresión. La confianza ilusoria en la violencia puede
llegar a dar una falsa sensación de seguridad en personalidades inmaduras de
cualquier edad; estableciendo la personalidad violenta como una forma de
ser y de estar en el mundo, una forma satisfactoria que
parece compensar –ilusoriamente– un gran número de carencias afectivas,
intelectuales o de habilidades físicas y de comunicación con los otros.
(Consecuencias Psicológicas de Dibujos animados. 1986. Internet).
También
es real que estos dibujos ofrecen consecuencias efectivas gracias a la
forma en las que estos aspectos son comunicados, captando la atención de los
niños. Aprenden aspectos positivos de la vida como finales felices,
príncipes
azules,
alegrías, cantares y también los distintos tipos de personalidades de cada
personaje.
Los
dibujos animados de Disney, no tienen ni una mala intención en la
información que transmiten ni en la manera en que lo hacen, sin embargo,
nosotros como receptores debemos reflexionar y estar atentos, ya que
estamos hablando de un público ingenuo, carente de la capacidad de reflexión de
un adulto. Su imaginación está alimentada por el entretenimiento, y todavía
no comprenden la realidad de la vida, ni las restricciones sociales.
Link: Texto: "Los dibujos animados de Disney influyen en el Público Infantil"
Comentarios
Publicar un comentario